Como en la foto, ¿verdad? con velitas y para dos. Sin dejar atrás su faceta seductora (que la tiene y mucho), el vino tinto es versátil a más no poder y, sobre todo, en invierno. Hoy en la Tienda de Vino vamos a dar algunas ideas para disfrutarlo tanto en soledad como en compañía. Porque también en soledad se disfruta de la bebida de los dioses.
Uno de los ritos que más tenemos asociados es la degustación de este manjar asociado a las grandes celebraciones. Vale que cualquier evento es bueno (desde los fastos navideños hasta un cumpleaños pasando por el Día de la Madre, del Padre…), pero a poco que cambiemos la mente podemos encontrar mil y una excusas. Y de eso se trata (y trataremos en el futuro): de disfrutar de pequeños momentos, de fomentar detalles que nos hacen la vida más hermosa. Y hoy vamos a dar ideas para disfrutar del vino tinto en invierno más allá de maridarlo con nuestras recetas favoritas
Abre tu botella de vino tinto tras regresar del trabajo
¡Que te lo mereces! Deja los bártulos. Cierra la puerta. Asegúrate de que la casa está cálida. ¿Eres tan afortunado que dispones de chimenea? Enciéndela y mira el fuego un rato. Date una ducha y sin consultar ni agenda ni teléfono para mañana, abre tu botella. ¡Disfruta de ese momento! El día a día contemporáneo es tan exigente e intenso que no nos damos cuenta de disfrutar de los momentos y, a veces, ni del trabajo. Por eso, es saludable, tras llegar a casa, hacer una pausa. Pero no vale un respiro en la que no seas consciente del momento.
Hoy te invitamos a paladear ese momento, como nuestros vinos de Madrid que te proponemos. Porque el encuentro no solo va a ser con la relajación sino también con uno mismo. Te dejamos dos nombres. Si la jornada ha sido dura, agotadora o frustrante (todos sabemos que hay días así), elige nuestro Aceña semidulce servido en copa grande (no en catavino). ¡Eso sí en su justa medida! Siéntate y disfruta. Que la jornada se ha dado bien y algún objetivo se puede dar por cumplido, en este caso, el Cantorral joven también de D.O. Vinos de Madrid va a ser una deliciosa compañía.
Con este plan, este momento de salud se va a convertir en una fiesta con total seguridad. Y será una que nos alimente y nos dé fortalezca.
Acompaña tus cenas a la luz de las velas
Tanto si vives en familia, en pareja, con mascota o en la más estricta soledad, las cenas de diario no tienen que ser “cualquier cosa”. Es uno de los graves problemas de la sociedad actual: que no ponemos cuidado en el momento. No hace falta mucha preparación para convertir este momento del día, justo antes de irnos a la cama, en todo un acontecimiento de disfrute.
Prepara tu plato preferido que no tiene porque ser copioso y abre un Alfamín crianza. Este vino tinto, como hemos dejado en la nota sobre maridajes, va bien con revueltos de verduras de invierno (setas, espárragos, alcachofas, calabacines…) Una copa sola y un par de velas harán que la cena sea ese momento esperado. ¡Eso sí mejor tu música favorita que el tronar de la TV y saca la vajilla buena! Las cosas de las que disponemos son para disfrutarlas.
Disfruta en pareja con un picnic al mediodía y llévate vino tinto
Uno de los planes más románticos que puedes hacer en pareja es un picnic. Como estamos en invierno, tiene que ser al mediodía y en lugar soleado aunque en un emplazamiento con nieve también es una opción a tener en cuenta. Busca un sitio bonito cerca de casa y prepara tu cesta par dos. Lleva ya la comida preparada que se pueda degustar fácilmente. Puedes preparar empanadas de carne y verduras, ensalada de pasta con aguacate y tomate, pollo al horno debidamente deshuesado, cachopos de ternera, escalopes de cerdo mezclados con pimientos asados… Necesitamos las copas que puedes trasladar en cestas específicas con cuidado y… el vino. Para esta ocasión hemos elegido el Alfamín joven criado en barrica.
Invita a los amigos a disfrutar de la chimenea
Si eres tan afortunado que dispones en casa de una chimenea, una auténtica fiesta es disponer un menú adecuado y descorchar el vino tinto. Eso sí, en este caso que sea al mediodía para que nos de tiempo de abrir más botellas y continuar la sobremesa con la charla que nos alimenta tanto o más que los platos preparados. Para esta ocasión hemos elegido el Olivita que marida de mil maravillas con la deliciosa ternera de la Sierra de Guadarrama, las aves de corral, los platos ligeros de caza (faisán, ciervo, corzo…), el cordero al horno o el cochinillo asado. Recetas todas ellas apropiadas para un día festivo de invierno. Sin duda, el calor de la chimenea y el aroma del vino tinto van a contribuir a hacer una velada memorable.
Vinto tinto también en las meriendas de invierno
Y terminamos dando una idea novedosa: maridar las meriendas con vino tinto. Aunque lo común es que el té de la tarde se presente con bebidas calientes o que nos abonemos al chocolate con churros, el vino hace de una merienda una experiencia única. Eso sí, esto es plan adulto. Si hay niños en la celebración, tenemos que echar mano de las otras opciones. Si los comensales nunca han tomado la merienda con vino, lo mejor es empezar con el Aceña semidulce. Este va divinamente con dulces muy golosos como las tartas de chocolate, las de frutos secos, la de zanahoria, el tocino de cielo o los dulces tradicionales que se elaboran friéndolos en aceite (pestiños, empanadillas de cabello de ángel, roscos de azúcar…)
Más cerca de Semana Santa podemos preparar deliciosas torrijas que harán de una merienda un momento especial si se marida, en este caso, con el Aceña seco. Esta idea también vale como postre para rematar un menú memorable.
¿Te apuntas a disfrutar del vino tinto de una forma diferente? En la Tienda de Vino estaremos encantados de poder resolver tus dudas.
Por Candela Vizcaíno