Como relatamos en el primer artículo de esta serie sobre las subzonas de la Denominación de Origen Vinos de Madrid, la misma está dividida en 4 subzonas desde el punto de vista geográfico: Arganda, Navalcarnero, San Martín de Valdeiglesias y El Molar.
En esta ocasión vamos a conocer un poco más de la subzona de Navalcarnero, que es una de las 3 originales desde el nacimiento de la Denominación de Origen en el año 1984.
D.O. Vinos de Madrid: NAVALCARNERO
Subzona de Navalcarnero: Ubicación y orografía
Comprende 19 municipios de la zona centro-sur de Madrid y cuenta con 5 bodegas. La subzona de Navalcarnero es la más pequeña en términos de cobertura de superficie, ya que representa aproximadamente el 22,5% de los viñedos registrados, el 15% de la producción anual y menos del 20% de los productores de vino de la DO Vinos de Madrid.
Navalcarnero está rodeada por el río Guadarrama al norte y al sur y por el río Perales, afluente del río Alberche, al oeste, y se encuentra en pleno río Guadarrama en el Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama), lo que pone de manifiesto el gran patrimonio natural y el valor de sus ecosistemas, como el Monte Atraes, famoso entre los amantes de las aves.
El rico patrimonio cultural de Navalcarnero es uno de los mayores atractivos de la zona. Cada año, miles de personas visitan Navalcarnero, fascinadas no sólo por su belleza arquitectónica, monumentos, plazas, museos e iglesias, sino también por sus tradiciones, paisajes y parques.
Los municipios incluidos son los siguientes por orden alfabético:
El Álamo, Aldea del Fresno, Arroyomolinos, Batres, Brunete, Fuenlabrada, Griñón, Humanes de Madrid, Moraleja de Enmedio, Móstoles, Navalcarnero, Parla, Serranillos del Valle, Sevilla la Nueva, Valdemorillo, Villamanta, Villamantilla, Villanueva de la Cañada y Villaviciosa de Odón.
Los suelos de la subzona de Navalcarnero
El suelo de la zona de Navalcarnero es de naturaleza sedimentaria, asociado a los elementos aportados por el río Guadarrama a partir de un análisis de naturaleza silícea.
La textura que encontramos aquí es una textura arcillosa arenosa en la que el suelo es muy permeable y propenso a las inundaciones, aunque la cantidad de precipitaciones en la zona hace que esto sea poco probable.
Su acidez oscila entre 5,5 y 7,5 de pH y los viñedos están situados en el campo y en zonas fértiles de la vega, cerca de los ríos.
Los suelos arenosos-arcillosos están compuestos por aproximadamente un 60% de arena, un 30% de limo y un 10% de arcilla.
El clima en la Subzona de Navalcarnero
La zona tiene un clima que es muy agradable en su mayor parte, caracterizada por un clima mediterráneo continental. El mes más húmedo en Navalcarnero es marzo, que tiene un promedio del 23% de la lluvia. El mes más seco es julio, con un 0,8% de probabilidad de precipitación.
El clima en Navalcarnero es suave, con temperaturas en promedio muy agradables. El mes más caluroso es julio, con máximas de 34 ºC y mínimos de 13 ºC. Durante septiembre, la ciudad tiene la mayor cantidad de sol, con un promedio de 14.8 horas de luz solar.
En la subcomarca de Navalcarnero, puede haber 50 km entre los distintos municipios y diferentes altitudes y microclimas, que afectan al desarrollo del vino, por ejemplo, hay grandes diferencias de altitud entre los 815 m de la zona de Valdemorillo y los 600 m de la zona de Villanueva de la Cañada o los 415 m de Aldea del Fresno.
Los vinos de Navalcarnero
En la zona de Navalcarnero, la Garnacha es la principal variedad cultivada junto con el Tempranillo y el Cabernet Sauvignon para producir un vino tinto de alta calidad. La excelente combinación de clima, precipitaciones y suelo confiere a las vides unas características óptimas.
Según las bodegas de esta subzona, sus vinos tintos tienen aromas de frutas negras, como las moras, así como aromas florales y de violetas.
Siendo muy pocas las bodegas ubicadas en esta subzona, tan solo 5, es decir, apenas un 10% de las 52 bodegas inscritas ahora mismo en los registros del Consejo Regulador, destaca la que tal vez sea una de las más mediáticas de todas, hablamos de las Bodega Pagos de Familia Marqués de Griñón, que es una bodega familiar con una tradición histórica y una perspectiva a largo plazo: desde 1292, la tierra ha pertenecido a la familia, y de generación en generación, la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente, la cultura y la tradición han sido sus valores.
